Isaac, Claudia, Jacob y Emma Hernández. Como familia hemos decidido servir al Señor en Papúa Nueva Guinea. Nos capacitamos en un instituto misionero con enfoque transcultural por cuatro años y medio. Nuestro deseo es que Dios sea glorificado por medio de nuestras vidas, y que seamos testigos de un Dios vivo y verdadero en todos lados y hasta lo último de la tierra. Consideramos que no somos competentes en nosotros mismos, pero reconocemos que nuestra capacidad viene de Dios. Él nos ha capacitado para ser servidores de un nuevo pacto. Así lo vemos en 2 Cor. 3:5-6