A finales de marzo tuvimos por primera vez la oportunidad de pasar la Semana Santa en una comunidad indígena korevaju. Aunque lo más ideal es enseñar sabiendo su idioma y cultura, vemos que esperan nuestra ayuda. Hans aceptó el pedido de enseñar en esos días especiales valiéndose de la ayuda del Pastor de la iglesia quien tiene un buen nivel de español para traducir a los asistentes.
Aprovechando la oportunidad y en relación con la Semana Santa, Hans enseñó sobre la condición perdida del hombre y la provisión del Salvador.
Wilmer, el pastor de la iglesia se esforzó en la traducción, y disfrutó la enseñanza. Es un buen siervo para discipular en la Palabra de Dios.
ESTRENANDO HABITACIÓN
Por fin tenemos un lugar donde llegar. Aquí ya en nuestro cuarto terminado. Cuando llegamos lo encontramos ocupado por una gallina empollando ahí comodamente, así que tuvimos que desalojarla para comenzar a instalar nuestras cosas. Solo hemos podido llevar dos colchonetas inflables y el toldillo, pero es muy agradable tener un lugar propio donde guardar nuestras cosas.
Esta es la primera vez que Hans debe hacer una ventana de madera. Fue una grata sorpresa para mi pues la ventana superó mis expectativas. Me pareció muy linda.
Hemos notado que a la gente le gusta vernos hacer cosas y participar así sea haciéndonos compañía. Aquí mientras Hans barniza la ventana ya terminada, la amiga le revisa la cabeza a la niña para aprovechar el tiempo mientras charlamos y vemos a Hans trabajar. Es muy lindo ver que no tienen reservas para nosotros, viven su cotidianidad de la manera más tranquila, dejando que veamos estos aspectos de sus vidas con normalidad.
AL VIVIR CON ELLOS GANAS
Lo bueno de vivir en la comunidad es que podemos estar ahí, en el lugar indicado cuando se están llevando a cabo sus cosas. Aquí Gisella invitó a Liliana para que aprendiera a cocinar el casabe, que hacen con yuca rallada y son la base de su alimentación.
EL SEÑOR PROVEYÓ PARA LA MOTO
La necesidad especial por la que habíamos pedido oración en nuestro anterior boletín informativo, fue respondida rápidamente por el Señor. Ya hemos podido ir dos veces a la comunidad en moto.
Damos gracias al Señor por su provisión lo cual para nosotros es un testimonio de su fiel sostenimiento en este ministerio.
Nuestras PETICIONES
de ORACIÓN
– Por la seguridad en todo sentido.
– Por un buen avance en el aprendizaje del idioma.
– Por nuestra resistencia física.
– Por nuestra adaptación a viajar en la moto.
– Por nuestra adaptación a vivir en la comunidad.
Correo:
A.A. 16569
Bogota, Colombia
E-mail:
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(To the order of Ethnos360 with a note for Hans and Liliana Frank)
